Homenaje sin política, por favor
Desgraciadamente pasan cosas en el mundo que nos marcan. Por suerte, esas cosas suelen sacar el lado humano y consiguen unirnos -algo que debería ocurrir más a menudo sin que tengan que pasar tragedias para ello-. Así que de algo muy malo suele surgir siempre algo bueno.
Mañana se cumple 1 año de los atentados de las Ramblas de Barcelona -que nos unió en el dolor y el cariño hacia las víctimas- y los actos conmemorativos están envueltos en polémica -cómo no-. Hace días que el President de la Generalitat de Catalunya dijo que los catalanes no tienen rey -no sé porqué mete a todos los catalanes en el mismo saco, o es que sólo le importan los catalanes independentistas-, y claro, el monarca va a asistir mañana al homenaje a las víctimas. El caso es que mañana se juntarán en el acto Torra y el rey Felipe VI. Pero la presencia del rey no solo disgustará a Torra, sino también a todos aquellos a los que no les gusta la monarquía o no perdonan sus palabras tras el 1 de Octubre. ¿Habrá mañana abucheos?
El ayuntamiento de Barcelona está intentando evitar que haya cualquier tipo de altercado, pero no pueden controlar a las miles de personas que seguramente asistirán a los actos. Es legítimo protestar contra el monarca o contra los políticos, pero mañana no es el día. Que un homenaje a las víctimas de un desgraciado atentado se convierta en una manifestación política es un error. Hay muchos días en el año como para que, en una fecha tan dolorosa, se tenga que mezclar la ideología política con la sensibilidad y la humanidad, que deben estar muy por encima de las ideas de cada uno en el terreno político. También hay organizada una concentración a favor de la monarquía. Y también es un error. Ni a favor ni en contra. Hay momentos adecuados para ello.
Desde aquí mi recuerdo para los fallecidos en las Ramblas y mi cariño para sus familias, y confío en el raciocinio de la gente que se acerque a homenajear y a mostrar su respeto. Porque lo de mañana va de eso, de cariño y respeto a las víctimas. Nada más.
Mañana se cumple 1 año de los atentados de las Ramblas de Barcelona -que nos unió en el dolor y el cariño hacia las víctimas- y los actos conmemorativos están envueltos en polémica -cómo no-. Hace días que el President de la Generalitat de Catalunya dijo que los catalanes no tienen rey -no sé porqué mete a todos los catalanes en el mismo saco, o es que sólo le importan los catalanes independentistas-, y claro, el monarca va a asistir mañana al homenaje a las víctimas. El caso es que mañana se juntarán en el acto Torra y el rey Felipe VI. Pero la presencia del rey no solo disgustará a Torra, sino también a todos aquellos a los que no les gusta la monarquía o no perdonan sus palabras tras el 1 de Octubre. ¿Habrá mañana abucheos?
El ayuntamiento de Barcelona está intentando evitar que haya cualquier tipo de altercado, pero no pueden controlar a las miles de personas que seguramente asistirán a los actos. Es legítimo protestar contra el monarca o contra los políticos, pero mañana no es el día. Que un homenaje a las víctimas de un desgraciado atentado se convierta en una manifestación política es un error. Hay muchos días en el año como para que, en una fecha tan dolorosa, se tenga que mezclar la ideología política con la sensibilidad y la humanidad, que deben estar muy por encima de las ideas de cada uno en el terreno político. También hay organizada una concentración a favor de la monarquía. Y también es un error. Ni a favor ni en contra. Hay momentos adecuados para ello.
Desde aquí mi recuerdo para los fallecidos en las Ramblas y mi cariño para sus familias, y confío en el raciocinio de la gente que se acerque a homenajear y a mostrar su respeto. Porque lo de mañana va de eso, de cariño y respeto a las víctimas. Nada más.
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