¿Libertad para vetar?
Cuando las cosas van mal y aparece alguien diciendo que puede hacerlas bien, que es diferente a lo que ya conocíamos, te genera unas expectativas muy altas y, por tanto, se le exige más. El problema viene cuando lo diferente resulta ser más de lo mismo.
Hace tiempo que surgieron los encontronazos entre Podemos y el grupo PRISA. El penúltimo fue por la decisión del partido de cambiar a Errejón por otro/a miembro/a de Podemos en la mesa política de 'Hora 25' en La Ser. Aquello terminó con Irene Montero presentándose en las puertas del Museo Reina Sofía -desde el que se hacía aquel día el programa- para intentar entrar y participar en la tertulia. La Ser se negó, amparándose en su libertad para invitar a quién quiera.
El último tuvo lugar ayer mismo. Y no sólo con La Ser: también con El País, El Periódico de Catalunya, Voz Pópuli, El Independiente y OK Diario. El partido morado vetó a estos medios en un desayuno informativo organizado para presentar a sus nuevos portavoces estatales. La Cope, RNE, La Razón, ElDiario.es, Libertad Digital y otros medios sí fueron invitados.
Podemos, en respuesta a La Ser, se excusó alegando un "problema de falta de confianza". Resulta sorprendente que un partido abanderado de la democracia y de la libertad de expresión se dedique a no invitar a determinados medios, más aún habiendo puesto el grito en el cielo cuando no permitieron entrar a Montero en 'Hora 25'. Cabe recordar también que el 16 de junio, es decir, la pasada semana, Pablo Iglesias fue entrevistado en 'Hoy por hoy' por Pepa Bueno. ¿Por qué unas veces sí y otras no?
Esta mañana Alberto Garzón ha comentado que "hay una vara de medir desigual con Podemos". Y fue esta declaración la que me hizo pensar en el primer párrafo de este post. Podemos vendía ser diferente, no parecerse a los partidos clásicos, defender más que nadie la democracia...y por ello creo justo que se les exigiese más que al PP o al PSOE, sobre todo en un momento tan complicado como el que se estaba viviendo cuando nació la formación. Nuevos aires, propuestas distintas...todo aquello era muy bonito -y lo sigue siendo para mucha gente-, pero creo que en cuanto pasó tiempo y se rascó un poco en Podemos, salieron grietas y verdades que demostraron que no tiene nada de diferente. Al menos para algunos, entre los que me incluyo.
Hace tiempo que surgieron los encontronazos entre Podemos y el grupo PRISA. El penúltimo fue por la decisión del partido de cambiar a Errejón por otro/a miembro/a de Podemos en la mesa política de 'Hora 25' en La Ser. Aquello terminó con Irene Montero presentándose en las puertas del Museo Reina Sofía -desde el que se hacía aquel día el programa- para intentar entrar y participar en la tertulia. La Ser se negó, amparándose en su libertad para invitar a quién quiera.
El último tuvo lugar ayer mismo. Y no sólo con La Ser: también con El País, El Periódico de Catalunya, Voz Pópuli, El Independiente y OK Diario. El partido morado vetó a estos medios en un desayuno informativo organizado para presentar a sus nuevos portavoces estatales. La Cope, RNE, La Razón, ElDiario.es, Libertad Digital y otros medios sí fueron invitados.
Podemos, en respuesta a La Ser, se excusó alegando un "problema de falta de confianza". Resulta sorprendente que un partido abanderado de la democracia y de la libertad de expresión se dedique a no invitar a determinados medios, más aún habiendo puesto el grito en el cielo cuando no permitieron entrar a Montero en 'Hora 25'. Cabe recordar también que el 16 de junio, es decir, la pasada semana, Pablo Iglesias fue entrevistado en 'Hoy por hoy' por Pepa Bueno. ¿Por qué unas veces sí y otras no?
Esta mañana Alberto Garzón ha comentado que "hay una vara de medir desigual con Podemos". Y fue esta declaración la que me hizo pensar en el primer párrafo de este post. Podemos vendía ser diferente, no parecerse a los partidos clásicos, defender más que nadie la democracia...y por ello creo justo que se les exigiese más que al PP o al PSOE, sobre todo en un momento tan complicado como el que se estaba viviendo cuando nació la formación. Nuevos aires, propuestas distintas...todo aquello era muy bonito -y lo sigue siendo para mucha gente-, pero creo que en cuanto pasó tiempo y se rascó un poco en Podemos, salieron grietas y verdades que demostraron que no tiene nada de diferente. Al menos para algunos, entre los que me incluyo.
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