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Cambia, todo cambia...

Los resultados de las elecciones autonómicas y municipales de ayer han convertido el 24-M en un día histórico en el que, por fin, todo ha empezado a cambiar. El avance de la izquierda es indudable y, aunque el PP ha sido la fuerza más votada, ha perdido más de 2 millones de votos y todo apunta a que perderá muchos de sus feudos.

He de decir que no confiaba en que se produjese tal cambio. Que quizá las cosas se moviesen sí, pero ha sido toda una sorpresa ver como Manuela Carmena prácticamente ha empatado con Esperanza Aguirre, o como Rita Barberá pierde la mayoría absoluta y con toda seguridad no gobernará. Estoy muy contento de ver que la oportunidad de volcar nuestra indignación en las urnas ha merecido la pena; me siento satisfecho al comprobar que algun@s polític@s que se creían intocables, impunes, se tienen que ir con la cabeza agachada y con el rabo entre las piernas. Me enorgullece que les hagamos caer.

Habrá que esperar a ver si se producen los acuerdos, pero está casi hecho que el Ayuntamiento de Madrid lo comandará Manuela Carmena (Ahora Madrid). Rita Barberá tendrá que dejar su despacho de alcaldesa de Valencia porque la segunda fuerza más votada, Compromís, está dispuesta a pactar para poder gobernar. En Barcelona ha ganado Ada Colau, conocida por su magnífica lucha contra los desahucios. En Valladolid, otro de los feudos 'peperos', también los Populares han perdido la mayoría absoluta y se da por hecho un pacto de izquierdas encabezado por el PSOE, lo que deja fuera de la alcaldía al no poco polémico León de la Riva.

En cuestión de Comunidades Autónomas, por poner algunos ejemplos, en Extremadura el PP deja de ser la fuerza más votada, perdiendo Monago su liderazgo tras sus viajes a Canarias financiados presuntamente por el Senado. En Aragón, también un pacto de izquierdas puede tumbar el gobierno de Luisa Fernanda Rudi. En Asturias, el PSOE gana las elecciones pero sin mayoría, lo que le obliga a un pacto con Podemos e IU para poder gobernar la Junta del Principado.

En Oviedo, tras muchos años de gobierno de derechas, el Partido Popular pierde la mayoría absoluta y vuelve a repetirse la posibilidad de pacto entre las formaciones de izquierda que le apartaría de la alcaldía, lo que supondría, como en tantos lugares, un cambio muy importante.

Aquí en Gijón, igualada lucha entre Foro, PSOE y Xixón Sí Puede (Podemos), aunque con la victoria del partido de Álvarez-Cascos con 8 concejales, seguido de los socialistas con 7 y de Podemos con 6. Más atrás se han quedado PP, con 3 concejales, lo que supone un descalabro importante perdiendo el 45,9% de los votos con respecto a su resultado de 2011; IU se queda con 2 y Ciudadanos entra con 1 concejal. La mayoría se consigue con 14 concejales, de modo que la suma de Foro, PP y Ciudadanos da 12 concejales; sin embargo, la suma de PSOE, Podemos e IU llega a los 15 concejales, que sí da la mayoría necesaria para gobernar. Espero que ese pacto se produzca y no tengamos de alcaldesa a Carmen Moriyón otros 4 años, porque no ha hecho nada en este tiempo salvo comenzar obras en media ciudad un mes antes de la elecciones.

Es el momento del cambio, de que entre aire fresco, de que se gobierne con cercanía, con una mayor implicación de los ciudadanos. Es el momento del diálogo entre partidos, del entendimiento...Es el momento de hacer política. Basta de absolutismos, de creerse por encima de los demás; basta de hacer y deshacer a tu antojo sin contar con nadie. La corrupción y esa sensación de impunidad han pasado factura y no queda mucho para ver qué ocurrirá en las elecciones generales de Noviembre. Deseoso estoy.

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