Anuncios2

¡Joder con el perdón!

Ocho son las definiciones de la palabra "Perdón" en el diccionario de la RAE. En ninguna de ellas veo que el pronunciamiento de esa palabra implique la solución automática del daño causado, pero parece que hay gente que no lo considera así.

Si nos ponemos a escarbar seguramente la lista será más larga, pero quiero dedicarle este post a 3 personajes del panorama español que pidieron perdón, o al menos reconocieron sus errores, aunque todo se quedó en eso, en palabras.

Todos recordamos la comparecencia de Rajoy en el Congreso sobre el caso Bárcenas el 1 de agosto del año pasado, donde reconoció haberse equivocado "al mantener la confianza en alguien que no la merecía". También dijo que se equivocó al "confiar en una persona inadecuada, al creer a un falso inocente. Me engañó, sí". Qué bonitas me van a quedar estas palabras, debió pensar Mariano. Reconozco mi error y listo. Lo curioso es que antes de esta comparecencia ya había anunciado medidas contra la corrupción que, a día de hoy, aún no ha llevado a cabo. Me viene a la cabeza la alcaldesa de Alicante, Sonia Castedo, doblemente imputada y que ni ha dimitido voluntariamente ni han forzado su marcha. Y ahí sigue, en su sillón de alcaldesa, con unos aires de chulería que parecen esconder un "De aquí no me echáis, porque si lo hacéis largo todo lo que sé". Mañana en el Congreso Mariano va a volver a presentar medidas contra la corrupción...¿Volverán a quedarse solamente en palabras?Visto lo visto, me temo que sí.

Otra que tal baila es Esperanza Aguirre, que tras la operación Púnica quiso dar la cara y pedir perdón por haber confiado en Francisco Granados, uno de los detenidos, e insistió en la necesidad de limpiar de corrupción el panorama político. Y claro, como abanderada que quiso ser de la regeneración política, se le ocurrió la genial idea de hacer un examen 'de honradez' a los candidatos a algunas alcaldías de la Comunidad de Madrid. Las imágenes de aquellos exámenes eran patéticas, volviéndose la estampa aún más ridícula cuando se descubrió que los exámenes los habían preparado el día anterior en la sede del PP.

Y el tercer personaje que ha pedido perdón hace escasos días ha sido el arzobispo de Granada, Francisco Javier Martínez, por los presuntos abusos sexuales a menores cometidos por el llamado 'clan de los Romanones'. Este sujeto, que ya arrastraba un currículum plagado de polémicas, se limitó a apartar de su ejercicio a 3 curas pero no denunció, que es lo que debería haber hecho ante un situación tan despreciable y asquerosa. En cambio, se tira al suelo en la catedral de Granada para pedir un perdón que no sirve de nada.

El perdón sin acción no vale. Es mejor no pedirlo y que se tomen medidas a pedirlo y quedarse inmóvil, o pedirlo y hacer un show. Queremos gente seria en las instituciones, gente directa, que no le tiemble el pulso a la hora de tomar las medidas necesarias ante cosas tan graves como la corrupción o delitos de abusos sexuales. Si queremos ver payasos, nos vamos al circo.

Comentarios

Post destacado